Francesco Molinari desarrolló una masterclass en los greens con su último putter Bettinardi Golf, embocando más de 36 metros de pats sumados durante la ronda final, para ganar su primer título del PGA Tour. Una victoria con ocho golpes de ventaja en el Quicken Loans National.

Utilizando un modelo Bettinardi Double Aged Stainless Steel (DASS) BBZero Tour, con fresado de cara FIT Face Milling y un punto en la parte superior como marca visual, el Nº17 del mundo registró el récord del campo con una tarjeta de 8 bajo par y 62 golpes, libre de bogeys, para terminar estableciendo el récord del torneo en 21 bajo par.